La responsabilidad de un Director de Proyecto es entregar el proyecto a tiempo, dentro del presupuesto y con las especificaciones requeridas. En otras palabras, es necesario especificar claramente lo que se debe entregar, y luego debes producirlo sin salirte del programa y presupuesto asignados.
Pero no es así de simple. Es posible cumplir con este objetivo y fallar completamente como director de proyectos de primera clase. Creemos que tu papel como PM es mucho más que solo eso. También incluye...
1. Reclutar a los mejores
Los mejores proyectos son entregados por los mejores equipos. Tu rol es reclutar a las mejores personas que puedas encontrar y asegurarte de que sus habilidades son las más adecuadas para que tu tengas toda la experiencia que necesitas para completar el proyecto exitosamente.
Es necesario hacer una descripción detallada de los puestos de cada persona en tu equipo para que todos sepan lo que se espera de ellos en cada paso del camino. Sólo con un gran equipo en el que todos sepan lo que se espera de ellos, podrás ofrecer un gran resultado.
2. Motivar y dirigir
Debes ser quien “sostenga el látigo” para que todo el mundo sepa que hay que hacer y para cuándo. ¡Tienes que ser estricto y asegurarse de que cada actividad se realiza a tiempo y sin atrasos! Si te atrasas, debes identificar la causa del atraso y tener planes de contingencia para retomar el camino.
Además de llevar el ritmo del proyecto, tienes que ser positivo y servir de apoyo para tu equipo, para que sepan que te importan. Debes predicar con el ejemplo y motivar a otros a hacer lo mismo. Si quieres que los demás trabajen duro, entonces tu necesitas trabajar más duro que los demás.
Lidera dándoles direcciones, motivándolos a trabajar duro y demostrando tu interés a lo largo del camino.
3. Saber manejar las finanzas
Cada proyecto cuenta con un presupuesto, ya sea claramente definido o no. Necesitas asegurarte de no gastar más de lo que te han asignado, o tu patrocinador / cliente no estará satisfecho con el resultado final . Administra las finanzas con cuidado haciendo una lista de todos los gastos y asegura que se presupuestan por adelantado. Si ocurre un gasto no presupuestado, informa a tu cliente tan pronto como sea posible para evitar complicaciones. Y si necesitas más presupuesto, ¡No tengas miedo de pedirlo!
4. Controlar el cambio
Tienes que ser quien controle todo cambio en el alcance del proyecto. La corrupción en el alcance es lo que mata los proyectos. Define el alcance del proyecto desde el principio y luego revisa la información cada semana para asegurarte de que no estás haciendo ningún trabajo no autorizado en ningún momento.
Tu cliente te pedirá algunos cambio a lo largo del proyecto. Pero no siempre cedas. Manténte dentro del plan original, y cuando ésto suceda, pide más tiempo o presupuesto. Recuerda, sin importar cuantos cambios te pidan, de igual manera te penalizaran si hay algún atraso o si te pasas del presupuesto. Así que controla el cambio cuando puedas.